Bautismo Espiritual v2 cap 6 significa que la persona es ahora parte del cuerpo de Cristo

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I. Profecías relacionadas con el Bautismo del Espíritu
II. El Prometido Bautismo en el Espíritu Santo.
III. La Venida del Espíritu Santo el día de Pentecostés.
IV. Referencias después del Día de Pentecostés.
V. La Llenura del Espíritu Santo.
VI. El Bautismo significa que la persona es ahora parte (identificado con) el cuerpo de Cristo, la Iglesia. — presente página —
VII. Problemas, Dudas, y Cuestiones sobre el Bautismo del Espíritu.




El Bautismo significa que la persona es ahora parte (identificado con) del cuerpo de Cristo, la Iglesia.

significa que la persona es ahora parte del cuerpo de Cristo

Vemos las tres personalidades de la Trinidad tomando parte en nuestra salvación: (1) en el nombre y por la obra del Hijo somos salvos, (2) por la obra de elección por Dios el Padre nos trajo al punto de la salvación, y (3) por la obra del Espíritu Santo redarguyéndonos y regenerándonos, hacemos la decisión de aceptar a Jesucristo.

El bautismo de Cristo – Mateo 3:13-17; Marcos 1:9; Lucas 3:21-23. El Bautismo de Juan fue un bautismo de arrepentimiento, o sea, la gente después de escuchar la predicación de Juan, se arrepintieron y confiaron en el Mesías que estaba por venir, entonces hicieron un testimonio público a lo mismo por elegir ser bautizado por Juan. Si el bautismo era necesario para ser salvo (y no es) o si era como nada más de muestra de confesión de pecados («eran bautizados… confesando sus pecados» Mateo 3:6) y arrepentimiento («os bautizo en agua para arrepentimiento» Mateo 3:11), entonces Jesús no lo buscaría. El no necesitaba ni la salvación ni arrepentirse de sus pecados porque nunca pecó. Juan identificaba su bautismo como muestra pública de confesión de pecados y arrepentimiento de los pecados de uno en preparación de la venida del Mesías. Como Juan identificaba Jesús como el Mesías, él preguntó ¿porqué el Mesías quiso ser bautizado de él, cuando Juan realmente necesitaba el bautismo del Mesías (la salvación)[1]? (Mateo 3:14). Pero Jesús insistió «porque así conviene que cumplamos toda justicia» (Mateo 3:15 cp. Lucas 7:29).

«El bautismo de Juan era la voz de Dios a Israel, y el remanente fiel respondió a ella (v. 5). Fue por lo tanto un acto de justicia de parte de Cristo, quien en cuanto a su humanidad había llegado a ser un israelita, el identificarse con este remanente fiel.» (Nota de pie de página en la Biblia Scofield, Mateo 3:15.)

Los creyentes del Nuevo Testamento son sacerdotes[2] para ofrecer sacrificios y ofrendas a Dios (1a Pedro 2:5). En el Nuevo Testamento los que se conviertan a creer en Jesús como su Salvador son llamados por Dios a la salvación, y también al servicio de Dios Vivo. Antes de empezar su servicio hacia a Dios, hay una ceremonia de purificación, su bautismo. No hablamos de la salvación (porque uno tiene que ser salvo ANTES de ser bautizado), pero estamos hablando de la dedicación y purificación de uno ya salvo para su servicio delante de Dios. Fíjense bien, ¡no hay tal cosa como de un creyente o cristiano que no sirve a Dios! Somos salvos para servir, para la disposición de Dios como El quiere hacer con nosotros. No es una opción o algo extra, la voluntad de Dios para todos que son salvos es de ser a la disposición (uso) de Dios.

¿Porqué Jesús se bautizó en el bautismo de Juan?: (1) para separarse del mundo común para servicio a Dios, o sea en términos de hoy, podamos considerar esto la «ordenación» de Jesucristo a su ministerio y marcaba el principio de su ministerio oficial (Mateo 4:17 «Desde entonces comenzó Jesús a predicar»). (2) El bautismo de Juan el Bautista fue una forma de separar el remanente fiel (el israelita que era verdadero creyente en Jehová) del judío común que era por este tiempo realmente incrédulo de Dios. Jesús identificó con este remanente fiel igual como una persona hoy en día identifica con la doctrina bíblica y la verdadera Iglesia (la iglesia entera de redimidos en esta época) por el bautismo. (3) Podamos ver a Cristo como quien abrió la puerta de la salvación y la vida cristiana victoriosa por medio de la influencia del Espíritu Santo. En un sentido, Jesús no necesitaba tanto este bautismo como el Espíritu Santo necesitaba que Jesús (siendo la unión de carne humana y Dios) abra la puerta para que Espíritu Santo obre en una forma más llena, constante, y poderosa en los hombres. Vemos este cambio también en como el Espíritu Santo llenó a hombres en el Antiguo Testamento escasamente y en el Nuevo Testamento mas abundantemente.




También ha sido anotado cinco razones porque Jesús fue bautizado por Juan el Bautista[3] aun que el bautismo de Juan tuvo una clara conexión con pecado: (1) Como Jesús lo vio, él necesitaba ser bautizado para cumplir toda justicia (fue la voluntad de Dios el Padre como Jesús lo entendió). (2) Por sujetarse al bautismo de Juan, Jesús apoyó públicamente el ministerio y mensaje de Juan el Bautista. (3) Por ser bautizado, Jesús condenó los hipócritas por su falta de arrepentimiento y se identificó con los publicanos y pecados esperando el reino de Dios (Lucas 7:29,30). (4) Jesús quiso ser bautizado no como un individuo en necesidad de perdón de sus pecados, pero como el Mesías, el representante del mundo delante de Dios. Su bautismo demostró su solidaridad con el mundo en su necesidad de redención, como Jesús tomó el castigo del mundo en la cruz. (5) Finalmente, la voz del cielo (Marcos 1:11) y el descenso del Espíritu (Lucas 3:21,22) significa el principio del ministerio propio de Jesús.

En el sentido de que Cristo identificó con los creyentes fieles por medio del bautismo en agua, también hoy en día un creyente obediente identifica con la iglesia fiel de Dios por medio del bautismo en agua.




[1]Esta es una indicación que el bautismo que Jesús iba a hacer por medio del Espíritu Santo es uno, una unión de la persona con Dios, especialmente el cuerpo de Jesús, la Iglesia.

[2]Lev. 20:7; 1ª Pedro 1:15; Esdras 10:11.

[3]De un articulo sobre el mapa de los lugares de Juan el Bautista en Parson’s Bible Atlas.